20 nov 2018

Recomponiendo la vida



RECOMPONIENDO LA VIDA
Recomponerse uno mismo
es algo así como desenterrar un libro
para leer alguna página olvidada,
ir buscando piezas,
rescatando pedazos,
partículas de vida que quedaron suspendidas
en una sala cerrada
y hablarle a la memoria
y abrazarse tiernamente en los recuerdos.
Entender el perdón
como parte indispensable.
Mirarse en el espejo y decir
"yo me perdono
por estos años pasados de inconsciencia"
porque hay que ser capaz de soltar todas las cargas,
arrancarse las espinas de los labios
y sonreír.
Recomponerse es levantarse,
no cesar en el empeño de sentir
que un@ merece lo bueno,
también tratar de ser justos
para poder discernir en qué fallamos
pues no se trata de ser autocomplacientes
sino más bien de enfrentarse a las verdades
por dolorosas que sean.
Después, hay que saber recolocar las emociones
en las dosis adecuadas
ahí donde se precisa.
Estaría bien poner un poco de felicidad en la mirada
o algo menos de ansiedad dentro del pecho
y recomponer el alma, la vida,
andar siempre de cara a la esperanza
y renovar los sueños...
Lorena Bonillo
2018